{"id":13100,"date":"2019-09-19T20:02:19","date_gmt":"2019-09-19T23:02:19","guid":{"rendered":"http:\/\/www.natangesang.edu.ar\/?p=13100"},"modified":"2019-09-19T20:02:19","modified_gmt":"2019-09-19T23:02:19","slug":"resumen-parashat-vayetze-3-2-2__trashed-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/www.natangesang.edu.ar\/resumen-parashat-vayetze-3-2-2__trashed-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2-2\/","title":{"rendered":"Resumen Parashat Ki Tav\u00f3"},"content":{"rendered":"

Parashat Ki Tav\u00f3 – Rabino Meir Szames<\/strong><\/h3>\n

Esta parash\u00e1 est\u00e1 encabezada por la mitzv\u00e1 de los Bikurim, las primicias. La misma consist\u00eda en tomar los primeros frutos de la tierra, y llevarlos en ofrenda de Primicias al Beit HaMikdash, Santuario de Jerusal\u00e9n. As\u00ed lo ordena la Tor\u00e1 en Shemot-Exodo 23:19 \u201cLos primeros frutos de las primicias de tu tierra habr\u00e1s de traer al Santuario de Ado-nai, tu Dios\u201d.<\/span><\/p>\n

Los Bikurim pod\u00edan ser llevados del modo que quisieran hasta Jerusal\u00e9n, pero una vez llegado al Monte del Templo, la persona ten\u00eda que tomar el canasto o cesta de Bikurim y pon\u00e9rselo al hombro. Una vez que lo ten\u00eda en su hombro dec\u00eda \u2018He manifestado hoy ante Ado-nai tu Dios, que he venido a la tierra que hab\u00eda prometido Ado-nai -a nuestros patriarcas- conceder a nosotros\u201d, luego se lo entregaba al cohen (sacerdote) para que ofrezca estos Bikurim, y luego pronunciaba la frase de aram\u00ed obed ab\u00ed \u201cArameo, extraviado era mi patriarca\u2026\u201d (Vers\u00edculos 5 a 10).<\/span><\/p>\n

Toda una muestra de c\u00f3mo la Tor\u00e1 nos llama a la reflexi\u00f3n y a la humildad: Llegando a la tierra de tus sue\u00f1os, a la Tierra Prometida, no te olvides de c\u00f3mo llegaste hasta all\u00ed. Ponerse el canasto al hombro, hacer una declaraci\u00f3n p\u00fablica. Todo el ritual tiene un fuerte significado.<\/span><\/p>\n

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Otro tipo de respuesta tambi\u00e9n puede ser dada. Menos dirigida a lo estrictamente legal, la encontramos en el tratado talm\u00fadico de Ketuvot 105b: \u201cTodo el que trae un regalo a un talmid jajam (sabio) es como si ofreciera una ofrenda de Bikurim (primicias)\u201d.<\/span><\/p>\n

Se cuenta que el rabino Tzadok HaCohen de Lubl\u00edn era muy cuidadoso de lo que sacaba provecho de los bienes ajenos, y no recib\u00eda \u201cpidionim\u201d, regalos de sus jasidim (seguidores). El \u00fanico tipo de \u201cpidi\u00f3n\u201d que recib\u00eda era el \u201cpidi\u00f3n haben\u201d (consist\u00eda en cinco monedas de plata que eran entregadas a un sacerdote por el padre de un hijo primog\u00e9nito al mes de nacido, ver Exodo 13:13), ya que la Tor\u00e1 lo hab\u00eda privilegiado con ese dinero por ser cohen (sacerdote). Y el dinero recibido en concepto de pidion haben solamente lo utilizaba para comprarse libros, y no utilizaba ese dinero para otras necesidades. Lo que necesitaba para vivir lo consegu\u00eda de lo que vend\u00eda su negocio familiar a cargo de su se\u00f1ora (era un negocio de venta de ropa usada). Cuando falleci\u00f3 su esposa, sus jasidim tuvieron la intenci\u00f3n de mantenerlo de forma suntuosa, pero \u00e9l se neg\u00f3 y rechaz\u00f3 esta idea. Entonces fue que uno de sus seguidores se ofreci\u00f3 como voluntario para atender el negocio familiar, en lugar de su difunta esposa, y esto s\u00ed fue aceptado por el rabino, con la condici\u00f3n de que le entregue s\u00f3lo lo que necesitaba para cubrir sus necesidades b\u00e1sicas, las cuales de por s\u00ed eran muy pocas: una comida por d\u00eda, al anochecer, y esta cena consist\u00eda en t\u00e9 y una panecillo o un poco de estofado de s\u00e9mola.<\/span><\/p>\n

Sucedi\u00f3 otra vez, que un jasid quiso obsequiarle una botella de aceite de oliva y una lata de pescado muy cara. C\u00f3mo sab\u00eda que no se lo iba a aceptar, tuvo una idea y le dijo: \u2018He aqu\u00ed que traigo mis Bikurim, como dijeron Nuestros Sabios de bendita memoria: \u201cTodo el que trae un regalo a un sabio es como si ofreciera una ofrenda de Bikurim\u201d\u2019. Y como el rabino conoc\u00eda la cita del Talmud recibi\u00f3 inmediatamente el regalo por su gran respeto por las palabras de los sabios talm\u00fadicos. Y ese mismo Shabat, durante la cena compartida con su familia y alumnos empez\u00f3 a tratar sobre este asunto y dijo: \u201cTodo el que trae un regalo a un sabio es como si ofreciera una ofrenda de Bikurim\u201d\u2026Y \u00bfacaso soy yo un sabio? Decir que no he estudiado no me es posible, porque he estudiado, pero \u00bfQu\u00e9 tiene si estudi\u00e9? \u00bfQu\u00e9 me corresponde si estudi\u00e9? Acaso no dicen tambi\u00e9n Nuestros Sabios de bendita memoria respecto al vers\u00edculo b\u00edblico de Mishlei-Proverbios 17:16 \u201c\u00bfDe qu\u00e9 sirve la riqueza en manos del necio? \u00bfPara adquirir sabidur\u00eda, siendo un insensato?\u201d, se refiere a aqu\u00e9l que estudia Tor\u00e1 y no la cumple (Tratado Ioma 72b). Cuando concluy\u00f3 la cena, vino uno de sus allegados y le dijo: \u00a1Todos quedamos conmovidos por lo que ha dicho nuestro maestro! Le respondi\u00f3 el rabino: \u00bfY acaso puedo ser yo un mentiroso? Si es que he recibido de manos de aqu\u00e9l hombre el regalo, significar\u00eda que soy un talmid jajam, y yo no creo serlo, por eso me he visto obligado a decir la verdad delante de todos ustedes.<\/span><\/p>\n

Su humildad respecto a las palabras de la Tradici\u00f3n es la que lo hace tomar el presente ofrecido, para no oponerse al dictamen talm\u00fadico, y a su vez, esa misma humildad es la que le hace reconocer que a pesar de haber estudiado, no estar\u00eda dentro de la categor\u00eda de un talmid jajam, y reconocerlo lo hace sentir obligado a decir la verdad y manifestarla p\u00fablicamente.<\/span><\/p>\n

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Una pregunta que se plantea en nuestros tiempos, es si hay que ofrecer Bikurim. La respuesta es negativa, por no tener ni Templo ni Altar (ver Mishne Tor\u00e1 Bikurim 2:2, entre otras fuentes).<\/span><\/p>\n

La forma en que est\u00e1 enunciado el proceso de la ofrenda de Bikurim nos trae un mensaje potente para nuestros d\u00edas: La tierra no nos pertenece, no de modo exclusivo, y no de modo eterno. No la recibimos sino a trav\u00e9s de un devenir hist\u00f3rico que se remonta a nuestros padres, a nuestros pr\u00f3ceres, a nuestros antepasados. Tener la obligaci\u00f3n de esperar a que nazcan los primeros brotes de nuestras cosechas nos sensibiliza con la naturaleza. La forma de acercarse y reconocer que fuimos errantes, que fuimos esclavos y hoy tenemos la posibilidad de disfrutar de cierta abundancia, nos tiene que predisponer a tener una sensibilidad hacia los que no tienen, a los que hoy no cuentan con la misma fortuna que nosotros.<\/span><\/p>\n

\u201cDe Ado-nai es la tierra y todo lo que ella contiene\u201d (Salmos 24:1), \u201cla tierra la entreg\u00f3 a los seres humanos\u201d (Salmos 115:16). Lo que hoy tenemos materialmente es meramente circunstancial. Esta lectura de Ki Tav\u00f3 llega siempre en medio del Jeshv\u00f3n HaNefesh, balance del alma que realiza el pueblo jud\u00edo en los d\u00edas previos a la llegada de un nuevo a\u00f1o en Rosh HaShan\u00e1, quiz\u00e1s sea un momento adecuado de reconocer lo que tenemos, a los que tenemos a nuestro alrededor, reconocer nuestras debilidades y fortalezas. Comenzar un a\u00f1o nuevo m\u00e1s humildes, m\u00e1s conscientes.<\/span><\/p>\n

Un a\u00f1o m\u00e1s dulce y mejor para todos.<\/span><\/p>\n

\u00a1Shabat Shalom uMevoraj!<\/strong><\/p>\n<\/div>

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