Parashat Beahalotjá – Rabino Sebastián Vainstein

La Parashá de esta semana comienza de la siguiente manera “…Habla Aarón y dile: cuando encendieres las lámparas han de alumbrar las siete lámparas hacia la parte de enfrente del candelabro” (Núm 8:3).

¿Por qué aparece la mitzva (precepto) del encendido de la Menoráh a penas finalizada Parashat Nasó en la cual se hacía referencia a la inauguración del Tabernáculo, de los presentes y sacrificios ofrendados por los jefes de las tribus de Israel?

Se nos cuenta en el Midrash que Aarón Hacohen reclamo a D-s, ¿por qué el no tuvo el privilegio de participar en las donaciones para el tabernáculo? Le contesto D-s que él tiene una función más grande que los otros, ¿por qué? Porque ellos solo ayudaron en la construcción, pero él va a tener un servicio permanente en el Tabernáculo y posteriormente en el Templo y es el prender el candelabro.

Prender el candelabro significa prender la luz y los valores del pueblo de Israel y el trabajo de Aarón Hacohen es mantener esta llama prendida siempre, y eso exige un trabajo permanente con mucha responsabilidad.

Por otro lado se nos enseña en el Midrash que los sacrificios solo pueden ser traídos mientras el Beit HaMikdash (Gran Templo de Jerusalén) está, mientras que la Mitzvá de la Menoráh es eterna.

Es verdad que el encendido de la Menoráh también cesa cuando el Beit HaMikdash no está. En realidad, la Menoráh sigue existiendo, aun después de la destrucción del Templo, a través de los descendientes de Aarón, los Macabeos: Su victoria milagrosa sobre la tiranía de Grecia será conmemorada eternamente por medio del encendido de las lámparas. La eternidad de la Menorah vive en cada hogar judío en las luces de Janucá (Rambam).

El Rabí Uziel Milevsky dice que hay dos maneras de encender una vela. Uno puede poner la llama directamente en la mecha, o se puede mantener la llama cerca de la mecha hasta que debido al calor empiece a arder.

Hay dos maneras de enseñar Torá y pasar la tradición a la generación siguiente. Podemos educar a nuestros hijos a ser estudiosos de la Torá y cumplir con las Mitzvot (preceptos), o podemos dejar que vean nuestra pasión por la Torá y sus Mitzvot.

Podemos utilizar todas las técnicas educacionales para inspirarlos hasta que su propio interés en la Torá y sus Mitzvot se encienda. Para simbolizar esto, se le ordenó a Aarón encender la Menoráh de la segunda manera, ya que la Menoráh simboliza a la Torá Oral, la transmisión personal de la palabra de D-s.

Si bien ya no tenemos más Beit Hamikdash, ni existe un día o fecha donde se nos prescribe encender la Menoráh, nuestra obligación es mantener encendida nuestra Menoráh interna y espiritual todos los días, logrando iluminar nuestras vidas y la vida de aquellas personas que nos rodean. Que podamos iluminar nuestros hogares e instituciones con la luz de la Torá, mitzvot; amor, paz, respeto y humildad.

La continuidad de nuestro judaísmo depende de nosotros, enseñando a nuestros hijos los valores y principios de nuestras fuentes por medio de los textos y la práctica; la mejror manera de transmitir y enseñar es a través del ejemplo.

Shabat Shalom