Parashat Jaiei Sará

21 noviembre, 2019

Parashat Jaiei Sará – Rab. Uri Romano

¿Qué significa que una persona es bendecida con “todo”? ¿Qué significa tenerlo todo? Según la Torá Hashem bendijo a Abraham “Bakol – en todo” (Gen. 24:1). Algunos afirman que esta expresión significa que a Abraham nunca le falto nada, que siempre tuvo literalmente todo. Así lo afirma por ejemplo el Rav Abraham ben HaRambam quien nos dice que nuestro patriarca fue bendecido con “todo elemento espiritual y material”. Otros comentaristas medievales, sin embargo, hacen hincapie en que “BaKol – en todo” hace referencia a alguna bendición en particular. Veamos algunos ejemplos: Con tierras (Rav Saadia Gaon), con un hijo (Rashí, y el Gur Arye agrega que la Guematria de hijo-ben es igual a la de la palabra BaKol, 52), con una larga vida y riquezas (Ibn Ezra).

El Talmud (b. Baba Metzia 16b) por su parte trae varias opiniones de diversos sabios de qué significa que Abraham tuvo la gracia de ser bendecido “en todo”. Algunos dicen que fue que aparte de hijos varones pudo también ser padre de una niña (¡y algunos afirman que incluso su nombre era Bakol!). Otros hablan de su sabiduría y el conocimiento que él poseía, ese saber era su bendición. Algunos dicen que era su capacidad de curar a los enfermos. La capacidad de sanar, de ayudar al prójimo, sería entonces su fuente de bendición. Otros incluso hablan que la bendición fue que pudo ver durante su vida como su hijo Ishmael se arrepentía de sus errores y así pudo retomar su relación con aquel. Otros afirman que su gran bendición fue que su nieto Esav no se fuera por “el mal camino” durante toda su vida sino solamente después de su muerte. Hay quienes afirman que fue que Dios le dio la posibilidad en vida de sentir lo que será el mundo venidero, o que el instinto del mal nunca lo dominó o incluso que el “angel de la muerte” no tuvo nunca poder sobre él.

¿Cuál es la explicación de tantas exegesis e interpetaciones diferentes? Me atrevería a decir que es lo que los psicologos llaman “proyectar”. Cada uno de estos sabios desde su particularidad, desde su visión personal de lo que para ellos sería que Dios los bendiga con todo, explicaron con que fue aquello que Hashem bendijo a Abraham. Para cada uno de nosotros una vida de bendición completa es otra cosa. Para algunos será el dinero, para otros la fama, para otros la sabiduría, para otros salud, para otros el poder tener descendencia y para otros poder ver a su familia teniendo una buena vida.

Rav Shimshon Rafael Hirsch (Alemania, XIX) al explicar este versículo en cuestión se percató de un detalle. Que sobre los tres patriarcas, Abraham, Itzjak e Iaakov se dice que Hashem los bendijo con “todo” (b. Baba Metzia 17a). Sin embargo Abraham fue bendecido BaKol (en todo), Itzjak MiKol (de todo) e Iaakov simplemente Kol (todo). El Rav Hirsch se da cuenta, sin embargo, que la vida de cada uno de estos patriarcas fue muy diferente. Para uno la vida fue más sencilla y estatica, para otro fue una vida de desafíos constantes pero de grandes éxitos siendo con coronado como el padre de una multitude de naciones, para otro su vida estuvo envuelta en el engaño, peripecias interminables y terminará descendiendo a Egipto. Entonces ¿Cómo pudo ser que la vida de estos tres patriarcas con vidas tan diferentes sean todas vidas “de bendición”? Quizás tenga que ver con el prefijo de su bendición. Abraham fue bendecido “en todo”, cada cosa que hacía, cada cosa que se proponía Dios lo bendecía. Itzak fue bendecido “de todo”, es decir, de cada cosa que le sucedía, buena o mala, él encontraba de aquello una fuente de bendición. Iaakov fue simplemente bendecido “todo”, sin prefijos, para él a pesar de todos sus avatares, problemas y tribulaciones, su vida misma era una bendición. Estar vivo era para él toda la bendición que necesitaba.

Que podamos, como leemos cada vez que recitamos el Birkat HaMazon, poder nosotros ser bendecidos “Bakol, Mikol, Kol”. Que podamos ser bendecidos en todo lo que necesitemos. Que podamos encontrar bendición de cada momento que transitamos. Y que la vida toda sea bendición.

¡Shabat Shalom!